Al contemplar un desnudo en un cuadro viene a la mente dónde está el límite entre lo que es arte y lo que es pornografía. Según algunos la diferencia la establece por un lado los ojos del artista y por el otro los ojos del espectador. Un ejemplo de esta situación esta en el cuadro “Olympia” (1863) de Édouard Manet, al pintar el desnudo de una prostituta, fue catalogado por los espectadores de su época como un insulto, no porque el desnudo fuera algo nuevo (ya existían cientos de cuadros de desnudos), sino por el tema, no se representaba a alguna diosa (Venus, Diana, Minerva, etc…), sino a una mujer común de la vida alegre. Hoy la obra, vista con otros ojos y es considerada una obra maestra del arte francés y mundial.
Igual como ocurrió con Olympia, pasa con las obras literarias, el Satiricón, el Kamasutra, los escritos del Marquez de Sade, las obras de Henry Miller, Anaïs Nin, y tantos otros pasaron por la censura al ser catalogados como pornográficos. Lo interesante es que el término pornografía no existía antes del siglo XIX, surgiría en la Inglaterra Victoriana, para separar los temas para adultos. Los cuentos eróticos se separaron de los cuentos de prostitutas y sus actos; aunque los límites que los separan se vuelven cada vez más difusos ante los mejores intentos de delimitarlos.
Por lo general el erotismo y pornografía buscan estimular los sentidos para alcanzar al goce, aunque la pornografía suele estar más asociada a la actividad de prostitución y a las escenas de violencia sexual. Así la regla de oro que deben seguir los cuentos eróticos para separarlos de los pornográficos es la misma que los cuentos de terror y fantasmas, sugerir más que describir. Dejar abierta la imaginación del lector la escena, no plasmar todo en ella.
Los temas en los cuentos eróticos suelen ser:
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Encuentros fugases y breves, en ellos dos personas se conocen, pero se separan, quedando la ilusión de lo que pudo ser.
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En segundas situaciones el encuentro lleva a la pareja a que avancen al segundo nivel, y se reúnen en un cuarto, esas aventuras breves te marcan con un recuerdo imborrable una noche única, sabiendo que al salir del sitio nunca más se encontraran.
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Otras veces el protagonista no tiene la culpa, al llegar a un motel sólo, cansado y agotado del viaje que aún no acaba, descubre que esa noche no podrá dormir, otros en el cuarto de al lado golpean la cama y gimen, el protagonista se convierte sin querer en un vouyerista involuntario, deseando por un lado que todo acabe para poder descansar y por el otro unirse a todo aquello que ocurre tras la pared que los separa.
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Historias de amores virtuosos son nuestro cuarto tema, típico de novelas rosas donde la chica (o el chico) sueñan con encontrar al primer amor, al alma gemela, aquel que la acompañara toda la vida, imaginado su primera vez y el resto de su vida.
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Lastima que noviazgo y matrimonio sean cosas diferentes, la rutina y el fastidio acaban con la relación de pareja y tarde o temprano alguno (o ambos) cometerán infidelidad, los desamores forman el quinto tema de estos cuentos.
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Los vicios y las manías, los gustos particulares y fetiches, juntos forman las historias de desenfreno, aquello que no podemos dejar se hacer, pese a que escapa de toda norma y se vuelve ante algunos ojos patológico.
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La llegara del plomero, la del chico que limpia la piscina, la niñera que cuida los niños, la hermanita del mejor amigo; quién en un momento de deseo a soñado tener una pequeña aventura, algo que simplemente lo saque de la rutina, algo que no haga daño a nadie, al menos eso se piensa, ello ocurre en los cuentos del vestíbulo, al ver pasar ante los ojos una oportunidad que nunca pensó.
- Finalmente llegan aquellas historias que terminan mal, aquellas que se publican en las paginas rojas de la prensa amarillenta, el del tipo que se suicido por celos, pero antes mato a los amantes; el de la prostituta que fue violada y golpeada hasta casi matarla; esas historias son las últimas de este grupo. Pero recordemos al relatarlas que aunque el acto sexual es importante de eso no se trata el cuento.
Ares Cronida 